Mi sorpresa cuando entre en el mundo de la estética

Lo que más me sorprendió cuando empecé a conocer el mundo de la estética, fueron las esteticistas.

 Me fije en una cosa de ellas. Mejor dicho dos.

 No pienses mal.

 No, no es por eso.

Vamos a ver, me gustan las mujeres desde pequeñito, igual hoy en día suena hasta a que soy un raro y un antiguo, pero es lo que hay.

 Pero no es por eso.

 He conocido muchos sectores y lo primero que más me sorprendió de las profesionales de la estética fue su formación.

 Hay profesionales de muchos sectores que mueren en vida, que no se forman, que mantienen su línea durante años y siempre hacen lo mismo.

Y las esteticistas, cosmetólogas, sois algo brutal, por la cantidad de formaciones que hacéis y la cantidad de experiencia que acumuláis.

 Para mí, eso es algo que no se suele ver en la mayoría de sectores.

 Tener la psicología del trato personal con tantos clientes y además, una formación continua es lo que más me sorprendió.

 Porque es algo de mucho valor.

 Lo segundo que me sorprendió, no fue tan bueno.

 Y fue, que vi que no se le saca provecho a todo ese potencial.

 Que con toda esa experiencia, formación, conocimiento de la clientela hay mucho margen para crecer y ganar mucho más.

 Creo, y es mi opinión, que formarse en tratamientos está muy bien, pero hay áreas del negocio que también se deben de controlar para sacar todo ese potencial.

No es fácil, eso también lo sé, pero en un  sector tan competitivo, necesitas ser empresaria.

 Para sacar provecho a todo tu potencial.

 Si, quieres seguir igual, no he dicho nada.

 Pero si quieres crecer profesionalmente te digo:

 La primera, prepararte en marketing, en gestión, en planificación y estrategia, en ventas, en publicidad y seguro que te va a ir bien.

 La segunda, entrar en mi mentoría, y crecer con las más de 50 lecciones que tienes a tu alcance, más las nuevas que voy incorporando.  

El enlace debajo:

MENTORÍA

Un abrazo

Luis

PD: Mañana entrego una lección a las alumnas donde les doy el trabajo hecho. Ahorro de tiempo y dinero.

25 publicaciones redactadas por mi. Ni por la inteligencia artificial, ni copias de publicaciones aburridas cómo para dormir a un burro de Instagran.